miércoles, julio 09, 2014

Entra Hiatt, sale White pero…



Toca cambiar de plástico del momento. Tras unas semanas con Jack White como protagonista, toca el turno del enorme John Hiatt que ha vuelto a hacer un disco tremendo, Terms of my surrender. Pero mientras hago el cambio se me ocurren una serie de preguntas que lanzo al viento ¿es tan caro hacer un vinilo como nos aseguran? ¿Es necesario que algunas novedades salgan a precios por encima de los 30 €uros? ¿Cómo se explica entonces que el disco de Jack White lleve todo lo que lleva y se pueda comprar por 20? ¿No le habrá costado nada incluir un holograma? (búsquenlo) ¿Ni que un tema empiece de forma diferente según donde coloques tu aguja? ¿O que se incluya una canción a 78 rpm? ¿Incluso que una cara vaya al revés en tu plato? A eso en marketing se le llama cuidar al cliente, que en este caso es el oyente. Y de expertos en la materia van cargadas las disqueras. Que se apliquen el cuento ¿no? Si White puede...

Sonando: Marlene de John Hiatt