Canción política
fresquita, fresquita. Desde su posición de cantante de Bad Religion, Greg
Graffin siempre se ha mostrado preocupado por temas políticos y sociales pero
ha sido en su paralela carrera en solitario y, sobre todo en su último disco, Millport, publicado hace solo unas
semanas, donde el norteamericano se ha mojado realmente. Con el soporte de
Social Distortion como banda, Graffin ha decidido que el primer single del
disco sea una versión del semi desconocido Norman Blake titulada «Lincoln’s
Funeral Train».
Casi cuatro minutos en
los que se narra la dicotomía entre una persona tan asociada a las libertades y
a la democracia como Abraham Lincoln y el hecho, ya casi olvidado, de que él
fuera el fundador del partido republicano, liderado hoy por el infame Donald
Trump. Decía el cantante en una entrevista radiofónica que “es una pieza triste
de Americana muy relevante hoy. La visión de ese tren funerario negro rumbo al
oeste es simbólico de lo que significa hoy el partido republicano”. Y en el número
de mayo de Ruta 66 podemos leer como
le cuenta a Mario Silvestre que “en esta canción se tratan las injusticias
raciales que es todavía un problema en una sociedad como la americana. La
música tradicional americana está llena de denuncias a las injusticias
raciales, a los distintos estratos sociales y como entre ellos luchan, unos por
la igualdad, otros por seguir manteniendo el poder sobre otros seres humanos.
Mucha gente recurre a la música tradicional como formato para hablar de
problemas sociales. Estos problemas continúan siendode actualidad y no es necesario recurrir a la
figura del cantautor o el “hobo” para continuar con la denuncia. «Lincoln’s
Funeral Train» es un símbolo de ello”. Merecida inclusión en nuestra lista de
canciones políticas.
Sonando: Lincoln’s
Funeral Train de Greg Graffin
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